Maracaibo. 10.03. 2015. (Prensa SAHUM) ¡Mami, quiero ser médico!. Ese fue el deseo que el pequeño Antonio lanzó al cosmos delante de su mamá, desconociendo la trascendencia de esa petición, la cual encierra un cúmulo de detalles inimaginables para tan joven criatura, quien desde ese momento comenzaría a recorrer en su vida la vía perfecta de la metamorfosis, de ser el hombre que cuidaría la existencia de otros hombres, soslayando inclusive fragmentos de su propia vida.
Este es un sencillo, pero muy sincero homenaje, para esos hombres y mujeres que estudian, se profesionalizan; en una o varias especialidades, para lograr competir, luchar y muchas veces vencer la sombra amenazante de las enfermedades y la merma de la calidad de vida de los humanos.
El Servicio Autónomo Hospital Universitario de Maracaibo (SAHUM) en nombre de su directora, doctora Noly Fernández, su equipo directivo, trabajadoras y trabajadores, conjuntamente con el Ministerio de Poder Popular para la Salud, MPPS, saluda y felicita a todo el gremio médico venezolano y muy especialmente al zuliano. ¡Feliz Día!
En esta importante ocasión, es menester recordar como lo expresa el “Plan de la Patria 2013-2019” que señala el elevar cualitativamente la prestación del servicio de salud, mediante la articulación de un verdadero sistema donde el paciente que ingresa a cualquier centro de salud; en cualquier punto del territorio nacional, reciba de manera oportuna la atención necesaria y que sea la propia dinámica de la estructura que lo canalice según sus requerimientos.
La Historia nos muestra el porqué de las cosas
Desde el año de 1955, el día 10 de marzo, se celebra en Venezuela el Día del Médico para recordar el nacimiento del Dr. José María Vargas, médico y cirujano, fundador de la Sociedad Médica de Caracas, quien se destacó en su época por su dedicación, preparación profesional y aplicación de técnicas novedosas de medicina en el país. Al sabio de la medicina, como también se le conoce, el Libertador le encargó la creación de la Universidad Central de Venezuela y la Facultad de Medicina de esta casa de estudios.
El ejemplo del Dr. José María Vargas fue determinante para los venezolanos, en especial para los profesionales de la medicina y fue factor primordial para el desarrollo de los estudios médicos en nuestro país. Debió transcurrir casi un siglo para que otro ilustre médico, el Dr. Luis Razetti creara las bases fundamentales para la constitución de la Academia Nacional de Medicina y del Colegio de Médicos de Venezuela, siendo este último el órgano precursor de la Federación Médica Venezolana en 1945.
El juramento Hipocrático
El Juramento Hipocrático es un símbolo de la moral colectiva y la promesa ética de los médicos unidos por un único propósito de curar y aliviar a sus pacientes. El juramento recibe su nombre de Hipócrates, un médico griego que nació en el año 460 A.C. Aunque sus palabras han cambiado con el correr de los siglos, muchos estudiantes de medicina modernos hacen alguna forma de juramento para seguir con las guías establecidas por el documento original.
La versión original hablaba de dioses y diosas griegos, especialmente Apolo, que era el Dios de la Salud. Prometía respetar a los dioses, pero también a la ciencia. Aunque muchos creen que el juramento contiene las palabras «En primer lugar, no hagas daño», esa cita es de otra cosa que se atribuye a Hipócrates. El juramento real del original dice: «Me abstendré de hacer daño o hacer mal alguno a cualquier hombre por él.»
A pesar de que Hipócrates escribió el juramento alrededor de 400 a.C. no fue una práctica común sino hasta el siglo XX. Como la medicina se ha vuelto más relevante, el juramento ha seguido siendo puesto en práctica. Hoy en día, prácticamente todos los estudiantes de medicina que se gradúan juran alguna de las versiones de él.
Si bien los médicos no están legalmente obligados por su juramento -ya que en realidad es la violación de las leyes de la junta médica lo que les puede costar su licencia- se enorgullecen de él y une a muchos a lo largo de su carrera médica para usar su conciencia y hacer lo que ellos sienten que es moralmente correcto, que es la esencia del juramento inicial.
¡Felíz Día del Médico!
Texto: Natacha Acosta